dc.description | <p style="text-align: justify;">Vi el debate acompañada de cerca de 80 personas que nos reunimos en un bar de la Ciudad de México con el propósito de ver y comentar el debate, juntos. La convocatoria la hizo por tuiter Strategia Electoral y acudimos pese a ser domingo, de noche y con lluvia. En ese espacio de la Ciudad de México de una cosa se habló todo el tiempo: el formato del debate ¿por qué tres moderadores? Y ¿por qué tan poco tiempo para posicionarse en los temas? Tengo la impresión de que lo predecible del comportamiento y el discurso de quienes aspiran a la presidencia de la república hizo que el formato fuera el centro de los comentarios</p><p style="text-align: justify;">Pese a que los temas abordados son de especial interés -pues lastiman a la mayoría de la población (seguridad pública y violencia, combate a la corrupción e impunidad y democracia, pluralismo y grupos en situación de vulnerabilidad)- los candidatos y la candidata utilizaron la estrategia que han venido usando (atacar al puntero en las encuestas) y dijeron lo mismo que les hemos escuchado (que ellos, no su proyecto de país, son la solución).</p><p style="text-align: justify;">No alcanzo a ver cómo a partir de lo que vimos puede entusiasmarse la ciudadanía para acudir a votar y cómo el electorado indeciso definir su voto. La mayoría de las cosas dichas (sin incluir los disparates de quien no teniendo nada que perder dice cosas fuera de lugar) podrían decirse por cualquiera de los candidatos y la candidata, no alcanzó a ver a partir del debate los grandes ejes del proyecto de nación porque el que se nos convoca a votar.</p><p> </p> | es_MX |